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martes, 19 de agosto de 2014

Marcando Diferencia. 1 Crónicas 1-4

El tiempo que estamos pasando hoy en día se caracteriza por ser una generación que se inclina hacer lo que los demás hacen todos los jóvenes y algunos adultos viven de acuerdo a la moda es decir simplemente hacen lo que ven hacer.
El adagio popular dice: “¿Para dónde va la gente?” Para donde va Vicente.
Este adagio se refiere a que hay mucha gente que ya no sabe que es lo que quiere no tienen carácter para poder decidir de acuerdo a su voluntad.
1 Crónicas comienza en sus cuatro primeros capítulos haciendo una muy larga lista de personas unas muy importantes como Caleb, David, Salomón y muchos otros que participaron de manera activa en la historia de Israel.
Pero entre todos estos grandes personajes sale a la luz pública el nombre de alguien que de alguna manera marca diferencia entre la larga lista. 4: 9 “Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos,
Que hizo que Jabes marcara diferencia. Que podría hacer que tú y yo marquemos diferencia.
1. No hizo caso de lo que el destino le podía deparar. Su nombre significaba dolor. V 9 b “al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por cuanto lo di a luz en dolor” no creas que ya todo está perdido. Si lo intentas siempre habrá algo por hacer.
2. Invoco el nombre de Jehová. V  10 a “E invocó Jabes al Dios de Israel”  no importa cuán oscuro parezca el panorama. Jehová siempre tendrá una respuesta a tu necesidad. Nunca permitas que las circunstancias te alejen de Dios. La mirada de Jabes siempre estaba puesta en Dios. Nuestra mirada siempre debe estar puesta en Dios y en nuestra meta.
3. Pidió Bendición. V 10 b “diciendo: ¡Oh! sí me dieras bendición,” la bendición de Dios es integral viene con todo lo que necesitamos. El problema es que muchas veces nosotros solo nos enfocamos en un problema olvidándonos que mientras estemos en este mundo siempre tendremos aflicciones. La verdadera bendición hace que podamos tener paz aun en medio de la tormenta.
Una persona bendecida es aquella que sabe vivir en abundancia o en escases. Muchas personas creen que ser cristiano es ya no tener más problemas. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
4. Siempre piensa en avanzar. V 10 c “y ensancharas mi territorio,” ensanchar nuestro territorio es luchar cada día por ser mejor. Para lograrlo es necesario ser diligente. Los negligentes están condenados a vivir en pobreza, la pobreza no siempre es económica hay gente pobre en el alma es decir son mediocres en todo. Proverbios 10: 4-5 “La mano negligente empobrece;  Mas la mano de los diligentes enriquece.  10:5 El que recoge en el verano es hombre entendido;  El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza.
Cada día deberíamos preguntarnos: que hicimos hoy, como fue nuestro actuar, lo hicimos con diligencia o de manera negligente.
Recuerda que para Dios el hacer tan solo lo que nos toca es ser siervo inútil. Dios siempre espera algo más de nosotros esto nos hace marcar la diferencia. Lucas 17: 10 “Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.
5. Depender de la mano de Dios, Jabes era humilde él sabía que solo estando de la mano de Dios conseguiría todo lo que se había propuesto. V 10 d “y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe Y le otorgó Dios lo que pidió” nunca pienses que es por tu propia capacidad que has conseguido lo que tienes. Hay otros mejor capacitados que tú y sin embargo todavía siguen desempleados.

Dios no quiere que seamos del montón. Dios nos ha llamado resplandecer entre los demás pero esto no es fácil se necesita ser valiente y esforzado. Tú y yo somos capaces de marcar diferencia solo es cuestión de intentarlo y dejarnos guiar por Dios.