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Cuando escuchamos esto se nos viene a la mente alguien explotador, una persona pereza o alguien que vive del trabajo de los demás. Bueno la verdad es que si a nosotros nos dijeran que vivimos de los demás nos parecería algo feo y a lo mejor nuestra respuesta seria: yo no vivo de lo ajeno para eso trabajo. David era un hombre muy trabajador pero estaba convencido que todo lo que tenía no le pertenecía. V 11 “Tuya es, oh Jehová, la magnificencia y el poder, la gloria, la victoria y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Jehová, es el reino, y tú eres excelso sobre todos.”
La única forma de servirle a Dios con alegría es si reconocemos que todo lo que tenemos es de él.
Cosas que debemos tener en cuenta cuando le servimos a Dios.
1. Tenemos que dar con Esfuerzo. V 2 “Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro, plata para las cosas de plata, bronce para las de bronce, hierro para las de hierro, y madera para las de madera; y piedras de ónice, piedras preciosas, piedras negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, y piedras de mármol en abundancia.” las cosas buenas cuestan.
2. Amar la Obra de Dios. V 3 a “Además de esto, por cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios” una cosa es amar a Dios y sus milagros y otra muy diferente es amar su obra aquí en la tierra. El amar su obra nos hace comprometer al servicio.
3. Dar más de lo que nos toca. Solo el amor nos hace dar más de lo que nos toca. V 3 b “yo guardo en mi tesoro particular oro y plata que, además de todas las cosas que he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios:” David daba de sus recursos personales. Hoy podríamos decir: el diezmo es nuestra obligación la ofrenda es de nuestro tesoro personal.
4. Motivar a otros a servir a través de nuestro ejemplo. V 6 “Entonces los jefes de familia, y los príncipes de las tribus de Israel, jefes de millares y de centenas, con los administradores de la hacienda del rey, ofrecieron voluntariamente.”
5. Dar de Todo corazón. V 9 “Y se alegró el pueblo por haber contribuido voluntariamente; porque de todo corazón ofrecieron a Jehová voluntariamente” el dar de corazón produce alegría.
6. Solo damos de lo que Dios nos da. Si entendemos que solo estamos dando de lo que le pórtese a Dios no vamos a sentir dolor cuando contribuyamos para la obra. V 14 “Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.”
7. Nosotros vivimos de lo ajeno, es decir vivimos de lo que nos da Dios. V 15 “Porque nosotros, extranjeros y advenedizos somos delante de ti, como todos nuestros padres; y nuestros días sobre la tierra, cual sombra que no dura.”
8. Lo que damos no es nuestro. Lo que damos le pertenece a Dios. V 16 “Oh Jehová Dios nuestro, toda esta abundancia que hemos preparado para edificar casa a tu santo nombre, de tu mano es, y todo es tuyo”
9. Dios conoce la intención de nuestro corazón. No demos solo por aparentar o por obligación. V 17 “Yo sé, Dios mío, que tú escudriñas los corazones, y que la rectitud te agrada; por eso yo con rectitud de mi corazón voluntariamente te he ofrecido todo esto, y ahora he visto con alegría que tu pueblo, reunido aquí ahora, ha dado para ti espontáneamente.”
Dios siempre recompensa la fidelidad de su pueblo. El servirle a Jesucristo de todo corazón hace que vivamos en constante bendición. V 25 “Y Jehová engrandeció en extremo a Salomón a ojos de todo Israel, y le dio tal gloria en su reino, cual ningún rey la tuvo antes de él en Israel”
El servirle a Jesucristo no es en vano. 1 Corintios 15: 58 “sí que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”
Todo lo que tenemos le pertenece a Dios los cielos y la tierra son creados por él. El servirle a Jesucristo debe ser un acto de agradecimiento. El agradecimiento es una fuerza que no solo nos hace actuar. El agradecimiento nos hace enamorar nos hace amar.
